
El Ayuntamiento de Granada y la empresa concesionaria del servicio de limpieza viaria y recogida de residuos en la capital, Inagra, han querido sumarse hoy a la celebración internacional del Día Mundial del Medio Ambiente con la entrega de premios a los participantes en la octava edición del Certamen de Arte y Reciclaje Re-Crea y la clausura de la exposición en el patio del Consistorio.
En el certamen, que cuenta con la colaboración de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Granada y la Escuela de Arte y Superior de Diseño José Val del Omar de Granada, han participado una treintena de creadores (alumnos y ex alumnos de ambos centros educativos) que han mostrado con su talento lo larga y bella que puede ser la vida útil de los materiales que cada día desechamos, tal y como ha aseverado la concejala de Limpieza Viaria, Ana Sánchez, durante el acto de entrega de diplomas.
La muestra, titulada ‘Desde la raíz’, ha explorado las diferentes ópticas de los artistas participantes la determinante función que ejerce la tierra en el sistema climático y los importantes retos que tiene el planeta por delante. Pinturas, collages, esculturas, instalaciones, tapices y creaciones de vestuario realizadas a partir de restos de telas, vidrio, plásticos, latas, maderas, papel y cartón, cerámica, metal, forja e incluso restos vegetales han sido los protagonistas de una exposición que ha intentado “conmover y llamar la atención sobre la determinante urgencia de cuidar todos juntos de nuestro planeta”.
Junto a la clausura de la muestra también ha tenido lugar la entrega de los diplomas de participación a todos los artistas y de los premios a los ganadores. Así, la escultura ‘El espíritu de sílice’ de Teresa Gavala López-Roberts ha sido merecedora del primer premio, dotado con 1.500 euros. La obra, una superposición de cristales reciclados donde se ‘funden’ plantas silvestres calcinadas en el horno, simboliza el calentamiento global y la desertificación que acabarán con la masa verde de nuestro planeta, representada por los pigmentos de colores de la base, y está terminada sobre una peana de alabastro extraído de los escombros de una cantera en Macael.